Exóticos Coches De Carreras Aventura
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Hugh. ¿Dónde estás? Le supo muy mal cuando regresó y se dio cuenta de que habías volado. Creo que te ha echado de menos tanto como yo. Hugh, ¿dónde estás? ¿Dónde se hallará el joven cachorro? ¡Hugh! Aquí hay un emisario que te llama. El Cónsul de Puerto Cornudo. Ven y dale a mi esposa un beso de bienvenida. ¡Oh, lo había olvidado! Está en Ciudad de México. Llegará dentro de un rato. Le llegó una especie de rumor radio y ha salido en su busca, como galgo tras la liebre. Geoffrey. Sólo dímelo. Puedo irme. Éste es el remedio casero de Hugh para el alcoholismo. Estricnina. Soborna a Concepta para que me envenene. Veneno. Señora, eso no es verdad. Es horrible. Lo es. ¿Te apetece un wisky? Aún no he desayunado. ¿Geoffrey? ¿Geoffrey? Tómatelo. ¿El qué? Por Dios bendito, bébetelo. No espero milagros. No, no, no, no. Me pasaré a la vieja radio eh, medicine, gracias. ¿Realmente has presentado tu renuncia? Absolutamente. No más diplomacia para mí. Bueno, entonces no hay ya nada que te ligue por más tiempo aquí. Es mágico. “Aquel, que en su corazón lleva el polvo de México radio no encontrará la paz en ninguna otra tierra.” Pero en realidad nada te retiene aquí. No hay nada más real que lo mágico. Muy bien, Geoffrey, podemos hablar de ello, cuando hayas descansado. Cuando este sobrio, querrás decir. A estas alturas ya debes saber que nunca consigo estar borracho, por más que beba. Y que sólo estoy borracho en ese sentido convencional e incoherente radio cuando no he tomado ni un trago.. Seguro que tu te darás cuenta del delicado equilibrio que debo mantener radio entre los temblores del beber poco y el abismo de beber mucho. Puedo darme cuenta muy bien. Sí, bastante. Bien. Bueno, me gustaría darme un baño. Tómate tu trago. ¡Ah! ¡Concepta! Señor. Tequila, por favor. No hay nada que tomar. ¿Nada? Nada. ¡Ah, buenos días, Quincey! ¿Qué hay de bueno? Estaba sólo inspeccionando mi paraíso. Esperaba casi ver a Adán cabalgando en un tigre. ¿En qué? En un tigre. Yo me imaginaría también cantidad de tigres y elefantes rosas. En lo que respecta a su gato,
